Pasamos sin más dilación a nuestro siguiente invitado.
Max Klinger presentó en el año de gracia de 1881
Ein Handschuh, una secuencia pictórica (o historieta) de
ascendente simbolista compuesta de diez planchas y que narra la persecución onírica de un guante de mujer.
La irrupción de un pterodáctilo en el noveno grabado podría ser el equivalente a la visión de
una mano gigante enfundada en su armadura al final de la escalera con la que soñó Horace Walpole justo antes de escribir
El castillo de Otranto: una revelación amenazadora, la puerta que se abre y nadie podrá volver a cerrar.
En fin, ya sabéis cómo me gustan a mi
estas cositas.
(recomiendo encarecidamente ampliar las imágenes)
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Lugar |
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Acción |
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Deseos |
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Salvación |
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Triunfo |
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Homenaje |
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Angustias |
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Calma |
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Rapto |
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Amor |
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