Inevitable preguntarse si hacía falta colorear los éxitos de Nino Bravo, después de haber maquillado al muerto en dúos con Francisco y cosas peores. Hasta yo recelaba (con los años me he vuelto hipersensible a las canciones mal producidas. Osea, al 90%, que parecen karaokes) y pregunté personalmente aprovechando un chat en El Mundo:
Así es, respiremos aliviados porque En libertad es obra de un fan, pero vaya fan: incluso quienes protestaron por el muro de sonido de La casa azul en sus últimos trabajos se sorprenderán del tratamiento conservador que ha aplicado Milkyway a los originales del malogrado cantante valenciano. En pocas palabras, las pasa por un filtro panoramizador y estereoscópico, aderezándolas con intermitencias mashup y un par de acelerones bailongos.
Y ojo, que las posibilidades son infinitas. Rama-Lama, por ejemplo, está sacando a la luz grabaciones de Cecilia que merecerían ser restauradas con el mismo aplomo. De momento tenemos un divertimento navideño pero yo, desde luego, repetiría.
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