Nina Simone: To love somebody (1969)


El disco no ha hecho más que empezar y los cuatro minutos que dura Suzanne ya son de oro. Por supuesto que hay otras muchas muestras de folk y pop en la azarosa discografía de Nina Simone, pero nada comparable a lo que escucharéis en To love somebody.
La Suprema Sacerdocisa del Soul era capaz de deslumbrar e irritar por partes iguales, a veces en el breve espacio que ocupa una sola canción. Pocas veces, tal vez solo en sus primeras grabaciones -luego vendrían los directos, los refritos, los trabajos alimenticios- , Nina tuvo tan claro el repertorio y llegó a ejecutarlo con la brillantez de la que hace gala en este trabajo de 1969. Hace suyas las canciones; parece que no pudieran interpretarse de otra forma. I can't see nobody es asombroso. No, qué diablos, lo asombroso siempre es ella.

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