Señales del fin: Ron Sexsmith versionado por Los Secretos en Qué tiempo tan feliz de Maria Teresa Campos

Si leyeron el título, poco más hay que añadir. Si recuerdan Epílogo, aquél programa de entrevistas para su emisión póstuma en Canal +, encontrarán cierta similitud (festiva) con el show de la Campos. Si ya se han cansado de esperar a que un contrapicado les enseñe el refajo de las Supersingles, qué hacían el otro sábado, como yo, ahí enganchados a Tele5. Si Enrique Urquijo levantase la cabeza, en fin, vería a unas señoras de Cañizares de la Vega haciendo palmas mientras su hermano, en lugar de publicar otra caja de grandeséxitosgrabadosendirectoadúoyconorquesta, profana Get in line. Eh: si hubiesen podido versionar a Supertramp, también lo hubiesen hecho, porque les encantan. Y encima lo dicen. Si Ron Sexsmith abre la mesita de noche del motel de carretera y sólo encuentra una maltrecha biblia, y decide ver un poco la televisión para acabar de dormirse, no achaquen a la casualidad, ni a la teoría de los seis grados de separación el hecho de que aparezcan en pantalla las bragas de una señora de Cañizares de la Vega.
Son señales del fin, amigos: señales a golpe de cañón antiaéreo, como le gusta a Kim Jong-un. Por no perder el tiempo apuntando, ya se sabe.